Todos los días, lo sepamos o no, usamos el poder creador del Ser infinito, en ocasiones algunas personas lo usan de manera inadecuada y se hacen daño a sí mismas, pero si aprenden a usar las facultades internas del espíritu, podrán elevarse por encima de cualquier limitación.
Un ladrón, un estafador, un mentiroso o una persona abusiva, usan las mismas habilidades sagradas que una persona exitosa, sabia, feliz o iluminada. Solo el rumbo es lo que hace la gran diferencia entre ser feliz o desdichado, exitoso o fracasado, inconsciente o iluminado.
Si observas el comportamiento de un alma celosa y de otra persona que confía, te darás cuenta que hay fuerza en el proceder de los dos. Pero la celosa usa sus fuerzas hacia lo inferior y la otra persona la dirige hacia un rumbo elevado. Los resultados para uno serán dolor y amargura, mientras que para el otro, serán triunfo y alegría.
Recuerda, los dos usan la misma cantidad de energía, pero la dirección es totalmente diferente. De ahí que una persona, sabiendo usar las facultades internas, puede convertirse en un ser de luz; mientras que otra persona, teniendo las mismas oportunidades, por desconocimiento o capricho egoico, decide usarlas de otra manera, hasta convertirse en un ente pervertido y sombrío.
Hace tiempo conocí a una mujer talentosa, con una habilidad mental muy particular, enojona hasta el tuétano de sus huesos; en alguna ocasión le sugerí amablemente que tratara de dominar sus arranques de enojo destructor, así sus habilidades tendrían un campo más amplio de acción positiva; finalicé diciéndole que además tanto enojo le lastimaría a ella y a otros.
Su respuesta me dejó boquiabierto, me dio una explicación "cientifica" de por qué su enojo no dañaría a otros ni a ella misma, sin embargo y a pesar de su explicación, no tenía amigos porque nadie aguantaba su carácter de los mil diablos; las personas con las que se ponía en contacto para desarrollar su trabajo le daban la vuelta, su rostro estaba endurecido, sus ojos reflejaban densidad, bufaba cada vez que algo salía de su control y aún así no aceptaba otra cosa que sus argumentos de chocolate.
Donde quiera que tú estés y cualquier cosa que hagas, siempre estrás confrontado contigo mismo; si tú quieres, puedes mirar profundamente dentro de ti y encontrarás un estanque inmenso de cualidades y facultades que con toda seguridad todavía no has usado completamente. Esas destrezas creadoras están en espera de ser descubiertas y ser usadas para aportar bien sin límite a tu vida.
No subestimes tus capacidades, solo necesitas saber que esas facultades están en ti y después debes aprender con humildad y sinceridad a usarlas correctamente.
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